Un modelo bancario resiliente, sólido y solvente.

El estudio demuestra que la banca cooperativa es un modelo más resiliente que el modelo bancario tradicional, lo que le ha permitido superar crisis como la económica de 2008. Con una cuota de mercado del 23 % en Europa frente al 10 % en España, se caracteriza, entre otras cosas, por su solvencia, una rentabilidad media de fondos propios por encima de la media del conjunto del sistema bancario, y por una estabilidad y fortaleza financiera mayores que la banca tradicional. Además, por sus características intrínsecas las cooperativas de crédito están muy ligadas al territorio y difícilmente se deslocalizan.

A diferencia de la banca tradicional, que ha sufrido una drástica reducción de empleo y un gran número de oficinas desde 2008, la banca cooperativa ha logrado no solo resistir, sino también sumar un número significativo de socios y socias . Esta expansión destaca su papel crucial en la lucha contra la exclusión financiera, especialmente en la España rural, donde las cooperativas de crédito han llenado el vacío dejado por los bancos tradicionales. Además, el informe subraya la mayor fortaleza financiera de la banca cooperativa, con mejores ratios de capital. Su modelo de negocio, arraigado en valores, la sostenibilidad y el servicio al socio, la posiciona como un actor clave para cumplir con la Agenda 2030, priorizando un crecimiento responsable por encima del beneficio a corto plazo.

Según Eloi Serrano, director de la Cátedra de Economía Social Tecnocampus - Universitat Pompeu Fabra: “Des del primer día, Caja Ingenieros ha sido un aliado de la Cátedra, ejerciendo su compromiso con la economía social. Las conclusiones del informe demuestran que el modelo cooperativo funciona y es estable. Además, genera democracia y es solvente. También necesita apoyo estratégico por parte de los instituciones y gobiernos, y es clave para un sistema financiero más justo y plural, que impulse una economía moderna y sostenible, tan económicamente, como socialmente y ambientalmente.”

Serrano también explica que, mientras los grandes bancos debían ser rescatados con más de 66.000 millones de euros después de la Gran Recesión, la banca cooperativa en España no solo aguantó el tipo, sino que le fue mejor sin recibir ayudas públicas. Es decir, estas entidades no cerraron oficinas ni despedir a trabajadores de forma masiva y, además, ganaron mucho más negocio en comparación con el resto del sector.

En palabras de Félix Masjuan, presidente del Grupo Caja Ingenieros y de la Fundación Caja Ingenieros: "El cooperativismo es una manera de entender la economía desde el equilibrio, la corresponsabilidad y el compromiso con el bien común. Desde Caja de Ingenieros seguiremos apostando decididamente por este modelo. Un modelo, el cooperativo, que define nuestra forma diferente de entender las finanzas: humanizándolas y con un impacto positivo en la sociedad y en el planeta."

Puedes descargar aquí el informe completo de La Banca Cooperativa ante los retos contemporáneos.